Los indicadores macroeconómicos desbordan un optimismo pocas veces visto. Sobre todo en Estados Unidos, donde la recuperación es más pronunciada, entre otras cosas debido a que el ritmo de vacunación es más elevado. Allí, actualmente el PMI Manufacturero se sitúa en 64,7.
¿Qué ha pasado cuando ha habido un optimismo macroeconómico desatado?
Pese a que ha ocurrido pocas veces en la historia, los datos nos demuestran cierta tendencia, aunque no muy pronunciada.
En promedio, el S&P 500 ha dado un -3.1% a 6 meses cuando el PMI Manufacturero está a 60 o más. De todas formas, la relación no es lo suficientemente fuerte como para concluir que existe una consecuencia clara.
Fuente: Refinitiv Datastream. Datos desde 1965. Elaboración propia Anchor Capital Advisors.
Lo que sí podemos observar es que más del 60% de los retornos son negativos, y los retornos negativos son más pronunciados en media (-7.7%) que los positivos (+4%).
La conclusión que podemos sacar de todo esto es cautela. Cuando invertimos en máximos y con un clima macroeconómico positivo, las probabilidades (aunque débiles) juegan en nuestra contra. Seguramente, esto es debido a que el ciclo bursátil va con unos 6 meses de anticipación al ciclo económico. Los mercados siempre descuentan expectativas y, a veces, las expectativas fallan.