Históricamente, Suiza siempre ha estado vista por ser un país tranquilo. Su neutralidad en las dos Guerras Mundiales y su estabilidad política e institucional tienen gran parte de culpa.
A nivel de mercados financieros, Suiza también ha estado vista con buenos ojos. Tanto es así que, sorprendentemente, durante la crisis del Covid-19 en Marzo de este año, los inversores se refugiaron de manera notoria invirtiendo en acciones del país helvético.
Eso ocurrió mientras la gran mayoría de categorías de renta variable estaban experimentando una salida masiva de flujos, probablemente hacia el mercado monetario.
Asimismo, los fondos monetarios suizos también experimentaron entradas de flujos durante Marzo, en línea con muchos de los fondos monetarios denominados en otras divisas.
Curiosamente, el Mercado Monetario Euro no obtuvo flujos positivos durante el mes de Marzo. Parece que los inversores confían más en el Franco Suizo que en la divisa europea. La incertidumbre política que rodea a la Unión Europea se hace notar en los mercados.