Las expectativas de una fuerte recuperación para 2021 le han dado un gran impulso al mercado de deuda High Yield. Con tipos de interés y spreads en mínimos, muchas compañías de grado especulativo (BB o menor), y comprometidas por los estragos de la pandemia, han aprovechado para emitir deuda ante un mercado muy laxo en sus condiciones de financiamiento.
Las emisiones de deuda High Yield denominada en dólares en marzo totalizaron 76 mil millones de euros, un 70% más que el promedio de los 5 años previos. Aquí lo importante es ir al fondo de la cuestión, es decir, analizar para que se esta utilizando esta deuda.
En el gráfico se observa como gran parte de las nuevas emisiones se están utilizando para refinanciar deuda, capitalizando un rolling a tasas más bajas.
Ante los cambios estructurales que aceleró la pandemia, la viabilidad de muchas empresas se ha puesto en jaque, por lo que creemos que no tiene mucho sentido prestar a menor tasa si el riesgo intrínseco de las compañías no solo no se redujo, sino que además enfrenta mayores desafíos en el futuro.