China crece a su ritmo más lento en más de 20 años. De hecho, durante la gran recesión creció a un ritmo mayor al de ahora.
Uno de los motivos que han llevado a China a crecer a tal ritmo es el elevado incremento de la oferta monetaria. Durante estos últimos años, el crecimiento de la oferta monetaria (M2) es menor que en años anteriores, a la vez que el PIB está desacelerando.
Paralelamente, la inflación está repuntando, en parte debido a la crisis porcina.
Si China decide aumentar de nuevo su oferta monetaria, ¿traerá más crecimiento o más inflación?